El Olimpo: Batalla entre dioses y gigantes

El Olimpo: Batalla entre dioses y gigantes
El Olimpo: Batalla entre dioses y gigantes

lunes, 21 de febrero de 2011

Eunomía

Era una de las Horas. Es la diosa del orden y la conducta legal. Se asoció con la estabilidad interna de un estado, incluida la promulgación interna de buenas leyes y el mantenimiento del orden público.
Era adorada principalmente en las ciudades de Atenas, Argos y Olimpia 

Diké

Es una de las Horas y a su vez la personificación de la Justicia moral. Diké vigilaba todas las sentencias de su padre Zeus , protege las empresas nobles de los hombres y persigue a los malos para imponerles castigo. Presidía sobre la justicia humana.  Era enemiga de todas las falsedades y la protectora de la sabia administración de la justicia.
En las tragedias Diké aparece como una diosa que castiga severamente toda injusticia, vela por el mantenimiento de la justicia y penetra en los corazones de los injustos con la espada hecha para ella por Aisa. La idea de personificación de la justicia se desarrolla con mayor perfección en los dramas de  Sófocles y Eurípides.
Fue representada sobre el cofre de Cípselo como una hermosa diosa tirando de la injusticia con una mano mientras con la otra sujetaba la vara con la que golpeaba.
Con frecuencia es confundida con Astrea, también hija de Zeus y Temis, y anterior diosa de la justicia.
Se la unió amorosamente al dios Dikastis y de tal unión nacería Homonoeia, la concordia; Dicaiosina, la retitud; y Areté, la virtud.
se la representa empuñando una balanza, donde se pesan las acciones de los dioses y de los hombres. Cuenta el poeta Hesíodo que Zeus sentaba a su diestra a Diké para que observara el comportamiento de los hombres.Ella encarnaba el derecho y el debido proceso ante todos los sujetos de una litis, pues el demandante exigía diké para que su pretensión sea atendida.

Irene

Es una de las Las Horas. El culto a esta diosa de la paz, como su propio nombre indica, se practicó en Grecia y en Roma. En Grecia fue especialmente venerada, porque la cultura helénica tenía muy idealizado el concepto de la paz y de la concordia. En muchas ocasiones, las palomas de Afrodita, se han utilizado como símbolo para representarla.
En Roma, bajo el mandato de Agripina, se construyó uno de los edificios más emblemáticos de todo el Imperio. el templo de la Paz, situado en un lugar privilegiado de la ciudad, la vía Sacra. Parece ser que fue decorado con un gusto exquisito, con los tesoros obtenidos en el expolio del templo de Jerusalén.
Se la identifica por sus atributos: una corona de flores y en las manos lleva una rama de olivo y el cuerno de la abundancia.

Las Horas

Existen diferentes leyendas a cuenta de las Horas, algunas de las cuales son contradictorias. Se las considera hijas de Zeus y de Temis, la diosa de la Justicia Divina y personifican tres estaciones del año, aunque luego pasaron a ejercer este mismo papel pero en relación con las horas del día. Existen versiones que afirman que también representaban las diferentes temperaturas.
Las Horas en su conjunto desarrollaban labores menores relacionadas en cierta medida con la fecundidad y la fertilidad, pero también tuvieron otras funciones como enganchar los caballos al carro del Sol, criar a Hera cuando era una niña, acompañar a Afrodita cuando apareció en el mar, pasear en el séquito de Dionisio, Pan o Perséfone y, sobre todo, disipar o reunir las nubes situadas en el Olimpo y custodiar su entrada.
Las Horas era tres: Irene, la paz; Diké, la justicia; y Eunomía, el orden. Sin embargo los atenienses las llamaron, en un primer momento de la historia: Talo, tallo; Auxo, que referido a una raíz significa crecer; y Carpo, fruto, denominación muy relacionada con la fertilidad.
Son representadas como jóvenes bellas y hermosas, ya que gozaban del don de la juventud eterna, sujetando en la mano una lacia túnica mientras bailan las tres juntas, razón por la cual a veces se las confunde con las Tres Gracias.

lunes, 7 de febrero de 2011

Morfeo

Se encargaba de construir los sueños de cada persona y de dar apariencia humana a las personas que en ellos aparecen. Además velaba porque nadie despertara a su padre, Hipnos, de su letargo.
Es representado como un anciano alado que porta una adormidera, planta con propiedades sedantes, de la que, de hecho, se obtiene heroína y codeína.
 Aparece en las obras de Homero y Ovidio. Este último cuenta en Las Metamorfosis  que Morfeo duerme en una cama de ébano  en una cueva sutilmente iluminada, rodeado de flores de adormidera. También cuenta que mientras sus hermanos Fobetor y Fantaso eran responsables de los animales, los objetos inanimados, y apariciones de los sueños, Morfeo se centraba en los elementos humanos.

Hipnos

Era el dios del sueño, hijo de Nix (la Noche) y hermano de Tánato, dios de la Muerte. Hipnos vivía en un palacio construido dentro de una gran cueva del lejano oeste donde el sol no llegaba jamás, como tampoco lo hacían el gallo, que despertaba al resto del mundo, los gansos o los perros, de forma que Hipnos vivía siempre sumergido en la tranquilidad, la paz y el silencio. Por un extremo de este curioso lugar pasaba Lete, el río del olvido, y a sus orillas crecían amapolas y otras plantas narcóticas que ayudaban, junto con el suave murmullo de las lánguidas aguas del río, en la tarea de atrapar el sueño. En medio del palacio se encontraba un hermoso lecho de ébano rodeado de cortinas negras en el que reposaba Hipnos, sobre blandas plumas con un sueño apacible plagado de historias. Su hijo Morfeo cuidaba de que nadie los despertara.
Hipnos también tuvo otros dos hijos llamados Iquelo y Fantaso. Hipnos podía dominar tanto a los dioses como a los mortales. Era el dios del Sueño, actividad de dormir, pero no de los ensueños; las historias que pasan por nuestra mente al dormir están gobernadas por Morfeo.
Es representado como un joven que duerme sosteniendo en una mano una amapola. En Esparta,  la imagen de Hipnos siempre se situaba cerca de la muerte.